Los profesionales del ejercicio debemos conocer cuales son los efectos de la carga de las sesiones sobre los organismos de los deportistas.
Así, definimos la carga de entrenamiento como la cantidad de trabajo físico realizado por el individuo junto con los indicadores de estrés asociados (deportivos o no).
Dicha carga la subdividimos en interna y externa. La carga interna es la respuesta psicológica y fisiológica que tiene nuestro organismo cuando lo sometemos a una carga externa combinada con los indicadores de estrés de vida diarios.
Para medir la carga interna podremos utilizar dos tipos de indicadores:
-Indicadores objetivos como son: lactato sanguíneo, niveles de cortisol, frecuencia cardíaca, …
-Indicadores subjetivos como: escala de percepción del esfuerzo, wellness questionaire, análisis diario de las demandas de vida (Dalda)
Por otro lado, está la carga externa que es el conjunto de estímulos aplicados para el desarrollo por parte del deportista para las diferentes capacidades físicas. Dicha carga externa está definida por el volumen, la intensidad, el tipo y método de ejercicio y la frecuencia. De este modo destacamos los siguientes indicadores de la carga externa para los programas de salud: